A pesar de vivir en una casa de 248m2, seguro que la factura de la luz de Michael Yannell (de 44 años) es más baja que la de todos sus vecinos, y es que su vivienda está diseñada para ser de energía cero, lo que significa que producirá tanta energía como consume, incluso más. Estamos hablando de una casa de $1.6 millones que es la primera de su clase en Chicago, y para muchos una de las viviendas más verdes hasta ahora construidas.
Una casa de estas características (cuatro dormitorios y dos baños) tendrá tres ocupantes, el propietario y sus dos gatos, pudiéndose argumentar que es un gasto excesivo, pero la realidad es que es un modelo mucho más ecológico que cualquier McMansion (casa de varios pisos de ningún estilo arquitectónico claro, donde se valora la apariencia superficial y gran tamaño, sobre la calidad).
La vivienda cuenta con prácticamente todos los elementos sostenibles que uno pueda imaginar, desde cubiertas verdes, almacenamiento de agua de lluvia, paneles solares tanto fotovoltaicos como térmicos, revestimiento de cedro certificado, cercado con elementos de plástico reciclado, gran empleo de materiales reciclados en su interior, pinturas de cero VOC, accesorios de fontanería de bajo flujo, electrodomésticos energy star, lámparas fluorescentes o LED, y para rematar, la calefacción y refrigeración se realiza por sistema geotermal (3 pozos de 76 metros).
En el ala sur (debajo) el techo de mariposa parece posarse en una viga de acero largo que permite que el área de la cocina–estar-comedor combinada este libre de columnas. Sin embargo, la altura se reduce lo suficientemente para obtener una sensación de intimidad. Esta impresión se ve favorecida por la presencia de detalles táctiles como azulejos de la pared hechos de botellas de vidrio verde recicladas.
El ala norte ofrece placeres propios: vistas al otro lado del patio, además de un dormitorio principal y dormitorio de invitados que se sienten como casas en un árbol.
En el sótano, se encuentran máquinas geotérmicos de calefacción y refrigeración vinculados a tres pozos escavados de 76 metros de profundidad. También en el sótano (abajo) se encuentran varios filtros para el sistema de aguas grises de la casa, que convierten el agua de la lavadora, y duchas, en agua para utilizar en sus inodoros. Se cree que es el primer sistema de aguas grises en una casa unifamiliar de Chicago.
El conjunto de paneles fotovoltaicos y termosolares generará 18.000 kilovatios hora al año, superando el uso de energía proyectada de la casa en un 40 por ciento.
Un techo verde se encuentra encima de la entrada al garaje subterráneo .
Las fotos son de la web que el propio Michael ha creado sobre su casa.
FUENTE: Chicago Tribune.